FGL.

"Hay cosas encerradas dentro de los muros que si salieran de pronto a la calle y gritaran, llenarían el mundo."

J.K.R.

"Las palabras son, en mi no tan humilde opinión, nuestra más inagotable fuente de magia, capaces de infringir daño y de remediarlo."

domingo, 14 de agosto de 2016

Singular.

Interpretas cada pensamiento cruzado en mi mirada como si de palabras gritadas se tratase.
Resaltas cada pequeña muesca que aterriza en mi rostro momentáneamente como si de territorio inconquistable fuese.
Adivinas cada sonrisa que perfila la comisura medio mordisqueada de mis labios como si de deseos olvidados rebosase.
Conoces cada punto cardinal de mi estrellado cuerpo como si de un mapa del tesoro hablases.
¿Cómo pretendes que me sienta a gusto en tu sola presencia si al entrar me va a tocar una inevitable radiografía del alma que probablemente desemboque en un agitado mar?
¿Sabes cómo desearía yo alcanzar una milésima parte de ese poder tan magnético que ejerces sobre mí?
¿Te haces una idea de cómo me remueve tanta atención por tu parte cuando por lo general soy la chica invisible?
Creo que cada sonido que sale de mi boca atraviesa inconscientemente tu radar y me preocupa que (a)notes la cantidad de adornos y entresijos que tejen mis palabras, pero aún más que estudies el neblinoso trasfondo que presiona cada una de mis células, intentando encontrar esa luz al final del túnel de mi boca.
Pensarás en todo momento el por qué hago que todo resulte tan complicado, para mí ya resulta fácil tras tantos años de forzosa e improvisada, en un principio, práctica. Es como la (típica) historia de nuestras vidas, encuentras un lugar cómodo y te adaptas a sus condiciones, en vez de amoldarlo a tu forma y figura, porque es más sencillo y mejor para el resto y porque tú llevas sin importar ni destacar mucho tiempo y crees que un poco más no va a dañar a nadie, no se te ocurre ni por un segundo pensar en ti misma.
¿Qué puedo hacer contigo cuando tu objetivo primordial es alterar mi ecosistema emocional? 
Todo sería fácil si ambos fuésemos sólo dos personas, pero tú sólo representas el conjunto de esas pequeñas partes de algunas que me psicoanalizan en determinados momentos cuando menos lo espero y más lo necesito.
Ojalá esto fuera un quid pro quo. Ojalá no. Ojalá que mi cabeza bajase de las nubes para recoger lo que no puede soltar mi corazón.

miércoles, 3 de agosto de 2016

Ocaso.

Escalofríos recorren todo mi cuerpo, en todo momento, sólo porque soy incapaz de saber qué hacer o decir para arreglar lo que yo he desembocado con mi forma de ser, o mejor dicho, mi forma de no ser.
En general creo que pasar de las cosas que suceden a mi alrededor y que sólo tienen que ver conmigo es lo mejor, al menos exteriormente, interiormente sólo doy vueltas y más vueltas, que a veces desembocan en cascadas, otras veces en espirales, y otras simplemente se quedan ahí, como si me gritasen a cada momento, haciéndome revivir todo una y otra vez.
Y saber que esto no tiene sentido, que no sirve de nada, que no va a llegar a ningún fin, no me frena. Porque prefiero absorber como una esponja a saltar ante cada puñal que indiscriminadamente me lanzan y que provienen de ambos lados de la balanza, porque prefiero cerrar los ojos antes que abrirlos y ver que he estado ciega demasiado tiempo como para hacer algo, porque me asusta que cuando haga algo, sea un error, como tantas veces ha resultado así ya, y entonces vuelva a dar un paso más hacia atrás, hacia lo cómodo, oscuro y conocido, alejándome de lo nuevo, luminoso y esperanzador.
Soy una cobarde, pensar antes de actuar es un buen lema, si algún día llegas a actuar realmente, pero si te quedas atascada en el primer nivel, nunca podrás salir de él pues jamás has sentido la sensación de la victoria que te da una buena, valiente y adecuada actuación, la cual te impulsaría a ti, y a los que te rodean.