FGL.

"Hay cosas encerradas dentro de los muros que si salieran de pronto a la calle y gritaran, llenarían el mundo."

J.K.R.

"Las palabras son, en mi no tan humilde opinión, nuestra más inagotable fuente de magia, capaces de infringir daño y de remediarlo."

domingo, 19 de julio de 2015

Descarga.

Esa tendencia tan típica, tópica y humana, todo al mismo tiempo, que tenemos todos cuando nos sentimos incómodos, nerviosos, acelerados, distintos, ofuscados, y demás, de soltarlo todo, de golpe, contra el primero que pillamos, sencillamente porque esa es la primera persona que se ofrece para servir de ojos, oídos, hombros, y en general, apoyo cuando ve que no podemos más, que el mundo se nos viene encima y quizá necesitemos otra espalda más para cargarlo, o un abrazo para calmar nuestro interior.
¿Y qué hacer cuando, habiendo trasladado todo lo que nos perturbaba y no nos dejaba tranquilos a una persona que no se esperaba ese ataque, no nos sentimos liberados? La carga compartida no significa que sea menos carga ni menos real ni menos dura, sólo implica que nos sintamos tristes, solos e inseguros, y encima culpables, por haber hecho que alguien que queremos pase por todo esto sin motivo y sin merecerlo.